Definición


Es un trastorno de la respiración durante el sueño que cursa con frecuentes episodios de corta duración de interrupciones o pausas de la respiración. Estas pausas adquieren importancia si son mayores de 10 segundos y se repiten de forma continuada.


¿Por qué se produce?


Se produce por un colapso o cierre total (apnea ) o parcial (hipopnea) de la via aerea superior, como consecuencia, en parte, de la relajación muscular  durante el sueño o por obstrucción anatómica de la oro –faringe (amígdalas, bocio…), que suele asociarse a una disminución transitoria en los niveles de oxigeno en sangre.


¿Cuáles son sus manifestaciones clínicas?


Lo mas frecuente es un ronquido fuerte, seguido de una pausa respiratoria, que finaliza en un alertamiento. Si esto ocurre multiples veces  a lo largo de la noche, disminuye la cantidad y calidad de sueño nocturno y al despertarse, uno tiene la sensación de no haber descansado. La consecuencia inmediata, es que siente sueño y tiene tendencia a dormirse durante el día en cualquier situación, es decir, presenta hipersomnolencia diurna, que interfiere en su actividad normal y que hace que se sienta más irritable, con dificultad para concentrarse y bajo rendimiento. Puede presentar cefaleas matutinas y sequedad de boca. Si el cuadro es severo, pede incrementar el riesgo de enfermedades cardiacas, de Hipertensión arterial, de accidentes cerebrovasculares, de accidentes de tráficos y laborales.

Es más frecuente en el sexo masculino, de mediana edad (50 años), con sobrepeso y cuello ancho, sin embargo, no es exclusivo de los mismos y el riesgo en mujeres se incrementa con la menopausia.

Habitualmente las personas que viven con usted son las primeras en darse cuenta de que existe un problema y es necesario que consulte a un especialista.


¿Cómo se diagnostica?


Es necesario un historia clinica detallada y realizar una POLISOMNOGRAFIA NOCTURNA.


Tratamiento


Debe ser individualizado en función de la gravedad del cuadro y  repercusiones diurnas.

En todos los casos, es conveniente seguir unas recomendaciones como la reducción de peso si existe sobrepeso, evitar alcohol y tabaco, no cenar copiosamente, seguir horarios regulares para dormir, etc.

Además de estas medidas, el tratamiento más habitual es la presión positiva continua en la vía aérea (CPAP). Es un aparato que emite una corriente de aire a presión, evitando que se cierre la vía aérea durante la noche y las apneas. Se debe utilizar todas las noches, y aunque no es curativo, en seguida se notan los beneficios y la disminución – desaparición de los sintomas. Existen medidas quirúrgicas alternativas para casos concretos.

 

Síndrome de apnea

Unidad de Sueño